Cómo reconocer el gaslighting y protegerse de la manipulación

El gaslighting es una forma sutil e insidiosa de abuso psicológico en la que el manipulador hace que la víctima dude de sus sentimientos, pensamientos e incluso de su cordura.

El gaslighting es una forma sutil e insidiosa de abuso psicológico en la que el manipulador hace que la víctima dude de sus sentimientos, pensamientos e incluso de su cordura. El término proviene de la obra de teatro y la película "Gaslight", en la que un marido convencía metódicamente a su esposa de que estaba perdiendo la razón. En el mundo actual, el gaslighting puede ocurrir tanto en relaciones personales como en entornos profesionales. ¿Cómo saber si estás siendo víctima de gaslighting y qué puedes hacer al respecto? Vamos a profundizar en ello.

Señales de que te están haciendo gaslighting

Dudas constantes sobre ti mismo

La primera señal de advertencia es la sensación de inseguridad en tus acciones y pensamientos. La víctima comienza a dudar de todo: desde las decisiones que ha tomado hasta su propia cordura. Puedes empezar a cuestionar tu capacidad para desempeñar tu papel como pareja, padre o empleado. Cada acción está acompañada por el pensamiento: "¿Estoy haciendo lo correcto?"

Creencia en la infalibilidad de la pareja

Otro indicador es la sensación de que la opinión de tu pareja es la única que importa. El manipulador puede convencerte de que solo él sabe cómo manejar las situaciones correctamente. Comienzas a depender de su juicio y descuidas tus propios pensamientos y sentimientos.

Tensión interna constante

Externamente, todo puede parecer bien, pero por dentro, la víctima siente una tensión creciente. Este estado no desaparece, sino que solo se intensifica con el tiempo. Esto se manifiesta de manera particularmente aguda cuando la persona comienza a evitar interacciones sociales con amigos o colegas, ya que se siente avergonzada o incómoda al hablar de lo que está sucediendo. Como resultado, la víctima se aísla socialmente, lo que la hace aún más vulnerable a la manipulación.

Etapas del gaslighting

La psicoanalista Robin Stern identifica tres etapas por las que pasa una víctima de gaslighting:

Negación del problema

En la etapa inicial, la víctima nota comportamientos extraños en su pareja, pero trata de ignorarlos. Piensa que es un incidente aislado que no se repetirá. La víctima no quiere devaluar la relación y prefiere creer que todo mejorará por sí solo.

Dudas sobre sí mismo

En la segunda etapa, la víctima comienza a dudar de sus propias percepciones y sentimientos. Puede intentar discutir con el manipulador, defender su punto de vista, pero poco a poco empieza a ceder. Las dudas se intensifican y la víctima empieza a creer que el problema realmente está en ella.

Aceptación de la "culpa"

En la última etapa, la víctima acepta completamente la perspectiva del manipulador. Está convencida de que está equivocada o incluso de que tiene la culpa de todo lo que sucede. En este punto, la víctima ya no puede distinguir entre la manipulación y el cuidado genuino, y comienza a ajustarse a las demandas del manipulador para obtener su aprobación.

Tácticas utilizadas por los manipuladores

Los gaslighters utilizan varias tácticas para lograr sus objetivos:

Negación

El manipulador a menudo afirma que estás imaginando cosas. Frases como "Eso nunca pasó" o "Nunca dije eso" se pronuncian con seguridad y autoridad, lo que te hace dudar de tu propia memoria.

Desvalorización de las emociones

El gaslighter puede decir: "Estás exagerando" o "Tu reacción es inapropiada". Estas afirmaciones te llevan a cuestionar tus emociones y a dudar de lo que realmente sientes.

Acusaciones de locura

Otra táctica común es convencer a la víctima de su inestabilidad: "Estás viendo cosas" o "No eres tú mismo". Estas afirmaciones provocan sentimientos de culpa e impotencia, aumentando aún más la dependencia de la víctima hacia el manipulador.

Transferencia de responsabilidad

El manipulador nunca admite su culpa. Al contrario, transfiere la responsabilidad a la víctima: "Esto es por tu culpa". Como resultado, la víctima comienza a justificar el comportamiento del manipulador, creyendo que merece tal trato.

Comentarios tóxicos y "preocupación"

El manipulador puede utilizar frases como: "Te lo digo porque te quiero", seguidas de comentarios hirientes. La víctima comienza a creer que el manipulador realmente se preocupa por ella y se acostumbra a las humillaciones constantes.

Cómo protegerse del gaslighting

El primer paso para protegerse del gaslighting es reconocer el problema. Si notas alguna de las señales mencionadas anteriormente, es importante estar alerta. Es crucial mantener tu propia opinión y confiar en tus sentimientos. No temas hablar de tus emociones y discutir lo que está sucediendo con personas de confianza o profesionales. Recuerda: los manipuladores actúan en la sombra, pero pueden ser desenmascarados si prestas atención a tu mundo interior.

Cuídate y no permitas que nadie manipule tus pensamientos y sentimientos.