La encontraste — es hermosa, ingeniosa, carismática. Dice que le gustas, pasa las noches contigo y te besa en la frente como en las películas. Pero a veces… algo no encaja. Es como si no fueras el protagonista de su historia, sino solo un personaje en un borrador. Sientes que no eres “el indicado”, sino “por ahora”. ¿Salió contigo solo para no estar sola mientras espera al “mejor candidato”? Vamos a analizarlo.
Te oculta como un secreto de estado
Es como si fueras su amante en un programa de protección de testigos — nada de historias, etiquetas o fotos juntos. “Simplemente no me gusta mostrarlo” es una excusa cómoda. Sobre todo cuando debajo de sus fotos en traje de baño hay montones de “me gusta” y comentarios de chicos. Una chica que realmente te quiere no teme mostrarse contigo en público.
Su teléfono es un santuario
No tienes que espiar, pero si cada vez que estás cerca oculta la pantalla o bloquea el teléfono a la velocidad de un hacker de la CIA, es una señal de alerta. Un secretismo excesivo suele esconder motivos poco saludables.
El chantaje con la ruptura es su táctica favorita
Cada discusión termina con: “¿Quizás deberíamos terminar?” Y no, no es dramaturga profesional. Es solo una forma de mantenerte en tensión y evitar responsabilidades. Una chica que te quiere no tiraría la relación por cosas sin importancia.
Un día es fuego, al otro hielo
Hoy está llena de amor y ternura. Mañana fría como el Ártico. No es misterio, es estrategia: mantenerte enganchado pero sin dejarte entrar en su corazón. Ese comportamiento no es misterio romántico, sino una montaña rusa emocional que cansa hasta al más paciente.
Coquetea con todos lados
Con otros chicos pestañea, lanza miradas, ríe más fuerte de lo normal. A veces, incluso frente a ti. Eso no es “solo amistad”, es una falta de respeto evidente. Y una señal de que no eres el único con quien juega este “juego”.