Personas que te atraen—no solo por su cuerpo

Hay personas que encienden la pasión—están en todas partes, fáciles de notar. Una mirada, una palabra, una señal es suficiente para despertar el deseo. Despiertan instintos, emoción, un juego. Sabes cómo empieza, conoces las reglas, sabes cómo terminará. Es emocionante, es placentero, pero… no es más que un momento fugaz.

Hay personas que encienden la pasión—están en todas partes, fáciles de notar. Una mirada, una palabra, una señal es suficiente para despertar el deseo. Despiertan instintos, emoción, un juego. Sabes cómo empieza, conoces las reglas, sabes cómo terminará. Es emocionante, es placentero, pero… no es más que un momento fugaz.

Y luego están los otros. Muy pocos. No es solo que sean atractivos o interesantes. Llevan vida dentro de ellos, algo raro, algo auténtico, algo que te hace querer entregarte por completo. Encienden un mundo entero dentro de ti.

A su lado, sientes que por fin has despertado. No intentan impresionarte—simplemente viven de una manera que te cautiva. Su voz tiene profundidad, sus palabras tienen significado, sus movimientos tienen libertad. No te retienen, no te piden que te quedes, pero aún así, quieres quedarte.

Esto es más que un simple enamoramiento. Es algo más profundo. No es solo desear tenerlos, es querer formar parte de su mundo. No temes perder el tiempo, porque cada segundo con ellos te llena.

Estas personas te hacen crecer, te impulsan a seguir adelante, te inspiran a vivir más intensamente. No inspiran con palabras, sino con su mera existencia. Puede ser un amigo, un mentor o incluso un desconocido. Pero si es una mujer…

Si es una mujer, ella se convierte en la única. No porque sea perfecta. Sino porque con ella, eres verdaderamente tú mismo.

No puedes buscarlas, no puedes predecirlas. Aparecen cuando menos lo esperas. Y si tienes la suerte de conocer a alguien así—no lo dejes ir. Porque eso es la vida.